miércoles, 8 de julio de 2009

Con mi asiento no te metas…!!!!

La descomposición social en la que vivimos, nos da muestras cada día a gritos, de lo mal que estamos como sociedad y como ciudadanos; no en vano la señora que habla con la “S” como “Z” tiene años y años tratando de que seamos “Un buen ciudadano”.

La cosa está, en que no hay micro radial o programa televisivo que valga cuando el rancho ya va por tres pisos, penthouse y azotea en nuestra cabeza, lo que algunos estudiosos llaman “marginalidad o pobreza mental”. El problema es grave y procedo a demostrárselos empíricamente, es decir con prueba en mano.

Si me lees y tienes carro, moto o cualquier medio automotor no entenderás lo que voy a narrar, porque aunque no te envidio por las mil horas que debes pasar en una cola en esta ciudad (Caracas) o cualquier otra de nuestro país, nada es comparable a meterse en el Metro de Caracas a cualquier hora del día, pero más aún, en lo que los gringos llaman “Rush Hour”, o en buen venezolano “Hora Pico” hermano…!!!!

Resulta que el pasar por empujones, hedores, sudor ajeno, agarradas de glúteos sin querer (dice uno) o un sinfín de grupos reggetoneros, hip-hoperos o merengueros que piden que les brindes un aplausooooooo…!!!!!!, no es lo peor que hay que vivir en uno de estos vagones bolivarianos, repletos de costosas gigantografías (por cierto de cada dos vagones, uno no tiene aire acondicionado); Lo peor que hay que ver es lo poco amigables que nos volvemos cuando la principal tarea de esos 10, 15, 20 o hasta media hora que pasamos en el subsuelo , es apoderarse de un puesto y conservarlo todo el viaje. Es literalmente una labor titánica y loable, digna de un verdadero atleta.

No solo se trata de correr más rápido que el otro como en el juego preferido de los cumpleaños de cualquier pelao “la sillita”, se trata de una vez en nuestro poder, mantenerlo en nuestras garras todo el viaje, en contra de esas “inoportunas” mujeres embarazadas, o mujeres con tres niñitos en los brazos, viejit@s, cojos, cieguitos, o misias con el mercado completo pero del Excelsior Gama eso si….!!!!!

Es increíble ver como un puesto o asiento se vuelve tan preciado, da mucha risa ver aquellos que se arman de lentes oscuros para hacerse los paisas, o aquellos que comienzan a cabecear para disque los demás crean que está dormido, sino, con mirar para el otro lado es suficiente para cumplir su cometido “ni de vaina te doy mi puesto”…..inclusive he escuchado aquellos que comentan: “pero ese viejo porque no se va para sus puestos azules….que se quede parado”. En parte es verdad, teóricamente el Metro tiene 14 o 15 maravillosos puestos para una gran gama de personas “azules” entiéndase: mujeres embarazadas, ancianos, discapacitados, gente con bastón, mujeres u hombres con niños chiquitos, etc….

Pero, me pregunto yo acá en mi cabeza ponzoñosa….costará tanto desprenderse de algo tan sencillamente estúpido como un asiento sudado, requeté usado y lleno de microbios…?????, que es lo que nos hace tan egoístas y básicos, que nos convierte en seres capaces de correr, atropellar, pelear e insultar por un fuckin’ puesto en el metro….creo que ni el viaje más largo y con tres mil transferencias nos impide darle el puesto a alguien que lo necesite más que nosotros y que decidió “por libre albedrío” no caminar hasta los escuetos puestos azules…

No se, será que me aprecio mucho más que un sencillo puestecito, pero creo que la satisfacción inmediata o tardía, en mi caso vale más…además si eres de los que le abren la puerta del vagón y sientes que en tu mente dicen: partidaaaaaaaaaaaaa!!!!! Y corres como Carl Lewis, para alcanzar el otro tan preciado premio metrístico, las escaleras mecánicas, como para que te sientas pendejo…!!!!

Esta es mi humilde opinión con respecto a las actitudes humanas, que muchas veces son las que hacen aún más deprimente y estresante, una experiencia que muchos vivimos a diario, y que por andar a pedal, tenemos que soportar….

La vida se puede ir en un segundo, sino que lo diga Jacko….así que para que tanto pelear y valorar algo que no es tuyo…porque NO lo es…..lo usan tus nalgas por unos minutos y ni siquiera te lo agradecen…ahí se las dejo…

En Arrietalandia hasta la música debe ser buena…con materia gris….por ende en nuestra perfecta comunidad además de que todas las viejitas serían felices porque habrían muchos puestos azules (no rojos), también estarían agradecidas de no tener que escuchar en sus gastados oídos música como esta.
La primera canción que está vetada, y que NO y mil veces NO sonaría en las radios o hilos musicales de nuestro país de maravillas es de Shakira, “La Loba”…no tanto por su ritmo o por su letra basura…sino por su chocante, bizarro y hasta enloquecedor “Auuuuu…”




Nos leemos en otra ocasión…

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tendrá que ver la apoderacion de los asientos en el metro con el sentido de pertenencia? Que si tienes lo adorado por todos en el metro? El asiento, ojo porque el aire acondicionado no lo tiene nadie! Ni la gente en las estaciones! yo creo que es como algo que van con el venezolano, no le doy el puesto a una mujer embarazada, o a un abuelito, pero si le doy billetes de cinco mil a cualquier mediocre que se monte pidiendo dinero... Asi es el venezolano, y por eso asi es Venezuela...

karen dijo...

Y dónde dejaste las escenas EMO de me lanzo no me lanzo a los rieles... y el infortunio de los no tan hábiles o ágiles usuarios que son empujados a los rieles por una mal cronometrada partida en busqueda del tan preciado "asiento sudado, requeté usado y lleno de microbios"...

Sandum dijo...

Yo nunca me he montado en el metro en horas pico ya que no vivo en Caracas, pero no tengo problemas en cederle el puesto alguien si no llevo mi laptop que pesa como 5kg (sin exagerar) por que el dolor de hombro que tengo que soportar después no es normal, y me pasa siempre que luego de ceder el puesto ni siquiera ofrecen llevarme mis cosas en sus piernas... Así es el venezolano! Saludos!

P.S.: A mi si me gusta la cancion! Horror!